13 de abril.
Revista Flamenca Fuente Vieja
Andalucía, la región española famosa por sus hermosas playas, una historia rica y su deliciosa gastronomía, ahora tiene una razón más para ser reconocida a nivel mundial: la aprobación de la primera
Ley Andaluza del Flamenco. Esta ley histórica otorga al flamenco, una forma de arte única y emblemática de la cultura andaluza, un régimen jurídico que garantiza su protección, conservación y promoción como bien social y patrimonio cultural inmaterial de la Humanidad.
Con 36 artículos y cinco disposiciones adicionales, la Ley Andaluza del Flamenco busca fomentar el flamenco como un elemento singular de la cultura andaluza, así como estimular el asociacionismo. La norma hace una mención específica a las peñas y a las entidades sin ánimo de lucro que tengan entre sus fines la divulgación y el conocimiento del flamenco. Además, el flamenco se incluirá en el currículo de las etapas de educación no universitaria como contenido que pretende impulsar actividades relacionadas con el flamenco, y tendrá cabida en el ámbito universitario y en el espacio europeo de educación superior.
La nueva norma también establece la creación del
Registro Andaluz del Flamenco para servir como instrumento para el conocimiento, publicidad y ordenación de los profesionales y entidades que desarrollen actividades relacionadas con el flamenco en Andalucía.
El flamenco es ahora inscrito como forma de expresión singular y relevante de la cultura del pueblo andaluz como Bien de Interés Cultural, con la tipología de Actividad de Interés Etnológico, en el Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz. Esto permite que los bienes muebles, inmuebles, actividades y otros elementos del patrimonio inmaterial, incluidas las creaciones individuales y colectivas del flamenco, puedan ser inscritos en el Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz para propiciar que se acoja a la figura de protección que mejor corresponda a sus características y necesidades específicas.
Esta ley es una muestra del compromiso y el reconocimiento y la protección del flamenco como una forma de arte único y emblemático de la cultura andaluza, y asegura su transmisión a las futuras generaciones.
Andalucía, que ya es conocida en todo el mundo por su sol, playa y gastronomía, ahora también es reconocida por su rica historia y su patrimonio cultural inmaterial único el flamenco.
Fuente: Revista Flamenca Fuente Vieja